Lujuria

Que corra tu sangre en este mar de llamas
que sea tu cuerpo la evidencia de tu delito capital,
intenta abrazar un manojo de flores
pues los pétalos regados por el suelo
será lo último que quede de ti.

Bebe agua hirviendo de un cántaro roto
cortate los labios con su ardiente filar,
alza los brazos hacia los rayos del sol
vuelve los días noches
y las noches déjalas como estan.

Envuelve tu cuerpo en vestidos intensos
has de un corto espacio tu pista para bailar,
déjame enseñarte como se bailar un tango
de esos en los que no nesesitas caminar.

No olvides al salir de este cuarto
volverte a colgar los rosarios de cristal,
no olvides que lo que te he enseñado
es una forma exquisita de pecar.